CUENTOS Y LEYENDAS...

Leyendas de Temalacayocan Hasta nuestros días los originarios de San Luis Temalacayuca les apodan los Chochos, porque cuenta la leyenda que había una mujer que la llamaban Doña Chona y esta señora tenia los senos muy grandes y a sus hijos le decían los hijos de doña chochota; de hay la el apodan chochos a los originarios de esta comunidad. El cuento del coyote: Anteriormente los coyotes bajaban al pueblo por las noches y se comían a los animales de los campesinos tanto borregos como pollos gallinas; entonces una tarde se reunieron los señores para ir a cazar el coyote al cerro; lo cazaran y de regreso lo traía colgado en un palo en los hombros y recorrían todo el pueblo casa por casa a juntar dinero porque ya cazaron el animal que se comió a sus animales y la gente cooperaba monetaria o en especie. Hace tiempo vinieron unos gachupines y dijeron que el pueblo de San Luis Temalacayuca estaba muy feo, lleno de tierra y la gente nada mas se esconde, y que jamás regresarían a este pueblo, por el camino hacia la ciudad de México sufrieron un accidente y dicen que vieron al santo del pueblo; fue entonces que regresaron y hasta misa pidieron en su honor y gratitud de estar vivos. ¿Se dice que? la campana de san Luis Temalacayuca la verdadera esta en Tepanco de López pues se dice que estaba muy grande y no alcanzo para la torre; y la de Tepanco esta en San Luis. Una vez había un señor que no tenia para la ofrenda para sus difuntos, entonces ese día muy temprano se fue al monte a traer leña, montado en su burro en el camino en el cerro vio a mucha gente donde iban cargados de cosas, como tenates llenos de ofrendas y dentro de esa multitud vio a sus papas que llevaban una penca de maguey en la mano; mientras que las demás personas llevaban ofrendas que iban contentos comiendo en el camino, sin en cambio sus papas iban tristes. Entonces al llegar a su casa le platico a su esposa; y le dijo vi a mis padres en el monte y llevaban pencas bajo el brazo, entonces respondió la esposa si... ya que tu te fuiste yo les puse quelite blanco en la penca de maguey como ofrenda porque no tenia mas que darles.